jueves, 27 de octubre de 2011

COBRESOL 3 INTIGAS 1 : SIN COBRE PERO CON SOL

En Moguegua no habrá ni un cobre pero sigue saliendo el sol. Cuando todo parecía tornarse cuesta arriba para el equipo de Teddy Cardama debido a una discutida expulsión de Velázquez, apareció la frialdad de Julio Caicedo para sostener al equipo y sacarlo de sus innumerables problemas. En colombiano jugó con inteligencia un partido que se disputaba en el campo de las emociones. Con sus compañeros incómodos por las decisiones arbitrales, el colombiano hizo posible que la calma se instalara en el estadio 25 de Noviembre a los 43 minutos luego de transformar un penal en gol. De entonces en más, Caicedo dejó en claro la importancia de tener la mente fría. Cuando los jugadores ayacuchanos buscaban el empate con más ganas que orden, el atacante de Cobresol apareció para generar contras que causaron zozobra en el fondo gasífero. Contagiados por Caicedo, Neyra, mediante un tiro libre, y Hernández, se unieron a las celebraciones tras decretar el segundo y tercer tanto moqueguano. En Moquegua no habrá dinero pero sí hay corazón y ganas de seguir peleando por la tan ansiada clasificación a un torneo internacional.

Para el individual: Con uno alcanza
Julio Caicedo se erigió como el jugador más destacado del cotejo por generar peligro al área ayacuchana pese a jugar como único punta, debido a la expulsión de Velázquez. A lo largo del encuentro, el colombo-venezolano jugó con inteligencia, administró con criterio el balón y supo cuando encarar hacia el pórtico de Araujo. De igual modo, fue efectivo al ejecutar el penal que le permitió a su equipo ponerse adelante en el marcador a los 43 minutos. Además, el trabajo en el medio campo de Neyra y Hernández fue fundamental para Cobresol. Sin trasladar demasiado del balón, ambos volantes le permitieron al elenco moqueguano tenerlo. Por el lado de las actuaciones discretas, la irresponsabilidad de Claudio Velázquez pudo costarle caro a su elenco, mientras que la poca participación de Landauri, Mendoza y Cruzado hicieron que Inti Gas no tuviera ideas en ataque; ello se vio reflejado en la escasa producción ofensiva, al punto de no contabilizarse ningún remate directo en el arco de Sotillo.

Para el táctico: No vale conformarse
Si bien la expulsión de Velázquez modificó la propuesta táctica del conjunto moqueguano que pasó del 4-cuadrado-2 a un 4-3-1-1 -con Juan Cominges detrás de Caicedo-, los locales supieron controlar el trámite gracias a labor del tridente conformado por Hernández, Bernales y Neyra, quienes se encargaron de robarles el balón a los ayacuchanos. Por su parte, en Inti Gas, el 4-cuadrado-2 de Ospina careció de agresividad en ofensiva. Pese a tener hombres con buen pie en la volante, como Landauri, Mendoza y Cruzado, los ayacuchanos mostraron poca vocación ofensiva y se contentaron con esperar el error de su rival. Pese a la ventaja numérica, no existió ambición por tentar una victoria en Moquegua. Incluso con el marcador en contra, Ospina no se animó a realizar cambios ofensivos. El cambio de Talaviña por Pérez en la segunda mitad reflejó la propuesta de juego del equipo gasífero.

Para el emotivo: Que reine el amor
A falta de dos minutos para el final de la primera mitad, Julio Caicedo logró abrir el marcador en favor de Cobresol tras ejecutar un penal. El colombiano además de desatar la algarabía de sus compañeros, puso el toque romántico al cotejo al celebrar su conquista con un cartel que decía: “Felicidades mi cielo, súmele uno más”. El colombo-venezolano demostró ser todo un conquistador dentro como fuera de la cancha.

Para el estadístico: En tercera base
El 3-1 ante Inti Gas le permitió al conjunto moqueguano lograr su tercera victoria en condición de local en el campeonato. Anteriormente los dirigidos por Teddy Cardama habían logrado vencer a Unión Comercio por 1-0 en la fecha 11 y a Melgar 2-1 por la fecha 19. No obstante, pese a la victoria, Cobresol continúa siendo uno de los peores locales del torneo.